Nos gusta mentir, lo necesitamos. Resulta imprescindible crearnos una imagen adecuada a nuestra fantasía narcisista, pertenecer a algo, a alguien (aunque nos pida el pasaporte covid)
Además envidiamos, bajo la categoría de crítica constructiva, todo aquello que no podemos conseguir y los demás tienen.
Muchas veces buscamos modelos que no parecen los más adecuados, no obstante, nos haremos sangre, si hace falta para conseguirlo.
Para, finalmente, recibir un baño de realidad… y suele ser con agua bastante fría.